Con la presencias del intendente Leonardo Raimundo y del gobernador Antonio Bonfatti, se realizó la primera prueba técnica del Acueducto Gran Rosario. Con esta obra se optimizará cuantitava y cualitativamente el servicio del agua que consumen 400 mil personas. Llegará a nuestra ciudad tras la extensión del ducto desde Capitán Bermúdez.
En la tarde de ayer lunes, el gobernador Antonio Bonfatti inauguró la planta potabilizadora del Acueducto Gran Rosario, que abastecerá a San Lorenzo, parte de Rosario, Granadero Baigorria y Capitán Bermúdez. Del acto, que se celebró en el predio ubicado en la intersección de Circunvalación y ruta 11, participó el intendente Leonardo Raimundo.
Mediante una inversión de 750 millones de pesos, la obra consistió en la instalación de una toma de agua del río Paraná y el montaje de una planta de tratamiento del vital elemento, que mediante el tendido de un ducto llegará a 400 mil habitantes. La nueva infraestructura permitirá a un amplio sector del Gran Rosario abandonar el consumo de agua de pozo, con un servicio que se optimizará tanto en términos cuantitativos como cualitativos. Ayer se realizó la primera prueba técnica de las instalaciones y su puesta en funcionamiento definitiva está prevista para dentro de aproximadamente dos meses. Para que el acueducto llegue a nuestra ciudad deberá montarse una cisterna, que estará ubicada en Barrio Mitre y realizar la extensión de los ductos desde Capitán Bermúdez. El proyecto técnico ejecutivo de dicha obra estará elaborado para fines del mes de julio y entonces dará inicio el proceso licitatorio.
En diálogo con medios de prensa, el intendente Raimundo destacó la magnitud de la obra, inédita en la historia de Santa Fe: “Después de 130 años por fin la provincia tiene una nueva planta de potabilización proveniente de ese recurso maravilloso que es el Paraná, una gran fuente de agua potable que hay que procesar para el óptimo consumo humano y que beneficiará directamente a todo San Lorenzo”.
En este sentido, el jefe del Ejecutivo local puntualizó: “Vamos a dejar de consumir agua de pozo que acarrea varios problemas, como la falta de bombeo cuando se corta la luz o hay poco consumo y la concentración de arsénico, potasio y sodio. En poco tiempo más, los sanlorencinos beberemos agua de óptima calidad”.
Por su parte, el gobernador Antonio Bonfatti remarcó la rapidez con la que se ejecutaron así como también la envergadura de la inversión pública que realizó la provincia: “Los trabajos comenzaron en abril del año pasado y representaron una inversión de 735 millones de pesos. No hay antecedentes de un Estado provincial realizando una inversión de esta magnitud. Hoy empieza una nueva etapa en la historia del agua potable de Rosario y la región”, afirmó.
Junto a Bonfatti y Raimundo estuvieron la intendenta de Rosario, Mónica Fein; el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio; el presidente de Assa, Sebastián Bonet, y otros integrantes del gabinete municipal. También el senador provincial Miguel Lifschitz; el diputado nacional Hermes Binner; y el intendente de Granadero Baigorria, Adrián Maglia.
