Ya funcionan en la esquina de San Carlos y 3 de Febrero dos contenedores para papel, cartón y vidrio para que los vecinos depositen sus desechos. La actividad presenta como beneficios directos el ahorro de materias primas, agua y energía, así como también la recuperación de materiales útiles mediante la labor de agentes recicladores.
Con la colocación de los primeros contenedores en el predio del Parador Turístico, en la esquina de San Carlos y 3 de Febrero, la Municipalidad de San Lorenzo lanzó un sistema de clasificación en origen de papel, cartón y vidrio. En los próximos días también se instalarán receptáculos en las plazas Alfonsín, De la Madre, Ovidio Lagos y en la Esquina de los Bancos. Paralelamente, se distribuirá folletería y se utilizarán diversos medios de comunicación para concientizar acerca de la importancia de esta práctica ecológica e informar sobre su correcta disposición. La iniciativa se instituyó como una política sustentable de gestión de residuos tendiente a dar cumplimiento al cronograma de acciones de la Ley de Basura Cero, que se propone evitar el desecho de residuos reciclables en los rellenos sanitarios. Tendrá como beneficios directos el ahorro de materias primas, agua y energía, así como también la recuperación de materiales útiles mediante la labor de agentes recicladores.
Tras la realización de esta prueba piloto, el emplazamiento de contenedores se multiplicará en diferentes sectores de la ciudad, informó el subsecretario de Medio Ambiente, Andrés Stella.
“Este programa se desarrolla en función a un trabajo que realizó la UNR en San Lorenzo sobre los recolectores informales, con el propósito de evitar que remuevan los contenedores de residuos tradicionales y cuenten con estas instalaciones específicas”, informó el intendente Leonardo Raimundo, quien participó de la presentación junto a Stella y al subsecretario de Gobierno, Hernán Ore.
Además, el mandatario apeló al compromiso de los vecinos para que el proyecto arroje los resultados esperados. “La Municipalidad pone las instalaciones, la Universidad hizo el relevamiento y la provincia dio su aprobación, pero el que tiene que poner la voluntad es el vecino. Así que ya sabemos que cuando juntemos botellas de vidrio, papeles o cartones, podemos acercarnos a estas isletas y depositarlos allí”, indicó.
