Los investigadores ya finalizaron todo el relevamiento sobre el territorio y en el transcurso de 2014 se abocarán a la excavación arqueológica. La iniciativa, apuntalada por el gobierno municipal, tiene como objetivos desarrollar una muestra museológica e integrarla al circuito histórico regional.
El viernes pasado en el Museo de Historia Regional del CCEM fue anunciado, con la presencia del Intendente Leonardo Raimundo, el inicio de una nueva etapa del programa de recuperación de la histórica estancia jesuítica San Miguel del Carcarañal. El establecimiento fue el lugar de origen del proceso poblacional del sur de la provincia y el proyecto apunta a desarrollar una muestra museológica para integrarla a un circuito histórico regional.
Según informó el Director de Archivo Provincial, Juan Nóbile, los investigadores ya finalizaron todo el relevamiento sobre el territorio, que incluyó mediciones, fotos aéreas y sondeos, y a lo largo de todo 2014 se abocarán a la excavación arqueológica.
La concreción de la iniciativa posibilitará añadir la hacienda a un recorrido de postas históricas entre las que se contarían el Convento San Carlos, el Campo de la Gloria y el Fuerte Sancti Espíritu. Además, el rescate institucional del espacio histórico se constituiría en una barrera a los constantes saqueos que con fines comerciales se perpetran en la zona.
Están involucrados en el proyecto la Municipalidad de San Lorenzo, las comunas de Aldao y Andino, el Gobierno Provincial a través del área de Archivo y Memoria y de Patrimonio, la UNR y el Instituto del Profesorado Nº 22 de Fray Luís Beltrán. En tal sentido, el representante provincial del Ministerio de Innovación y Cultura destacó el trabajo articulado que están desarrollando las distintas instituciones: “No es usual que municipios, comunas, aficionados y profesionales se sumen para trabajar en un proyecto arqueológico. Estamos organizando una red y con el involucramiento de la sociedad es la única forma de que el patrimonio se preserve”.
Por su parte, el Director de Cultura de la Municipalidad, Ángel Nánzer, sostuvo que con estas acciones “Santa Fe sale de una postergación cultural gravísima”. “La mayor parte de las estancias jesuíticas están reconocidas por la UNESCO como patrimonio mundial y ésta fue la estancia más al sur del continente. Sin dudas, esto será un antes y un después en la historia patrimonial de la región”.
En la misma dirección, Nóbile exaltó la trascendencia histórica, arqueológica y antropológica del establecimiento jesuítico. “Fue uno de los primeros asentamientos estables de la región, tuvo una alta dinámica socio-cultural y dio origen a nuestra ciudad. Todo lo que podamos rescatar, como fragmentos metálicos, de cerámicas o restos de construcción, será para nosotros muy importante”.
Por último, Raimundo subrayó la calidad del grupo de investigadores y remarcó la envergadura del trabajo que están llevando a cabo. “Tenemos la historia, el equipo profesional, las ganas, la vocación política y el acompañamiento de las autoridades sin ningún miramiento de color político. Estoy convencido de que este proyecto será exitoso”.
La Estancia San Miguel en la historia.
En 1716 la Compañía de Jesús fundó una estancia, denominada de San Miguel del Carcarañal, cuyo casco se levantaba a la margen derecha del río Carcarañá en jurisdicción de la actual localidad de Aldao (Departamento San Lorenzo) y enfrente a Andino. Era un establecimiento ganadero dependiente del colegio La Inmaculada de Santa Fe, destinado a producir bienes para el sostenimiento del colegio del que dependía.
Uno de los puestos de la estancia se denominaba de San Lorenzo y estaba emplazado en las cercanías de la desembocadura del Arroyo San Lorenzo. Unos pocos ranchos constituían la población integrada por la familia del puestero y la de otros peones y reseros.
El 30 de Octubre de 1768 la orden jesuítica es expulsada de España y de sus colonias de América en cumplimiento de la real orden de Extrañamiento dictada por el rey Carlos III. Debido a la expulsión de los jesuitas se interrumpe la tarea evangelizadora.
La Estancia San Miguel pasa a jurisdicción de la Junta de temporalidades de Santa Fe, y en 1774 las tierras son subastadas públicamente. El regidor de Santa Fe, don Francisco de Aldao, fue uno de los adquirentes, repartiendo las tierras entre sus hijos. Félix Aldao, hijo del regidor, recibe una legua cuadrada, donde se levanta la ciudad de San Lorenzo.
El 1 de enero de 1780 la Capilla San Miguel pasó a manos de un pequeño grupo de franciscanos. Traían el propósito de convertir el lugar en centro de operaciones para su apostolado entre fieles e infieles, comienza a llamarse el lugar Colegio San Carlos. En 1790 buscan un lugar más apto para vivir y mejor comunicado y Don Félix Aldao dona una extensión de terreno a los franciscanos. A partir de ese momento comienza la construcción y el 6 de mayo de 1796 es trasladada la comunidad franciscana al nuevo edificio.
