La ceremonia fue presidida por el gobernador Hermes Binner y el Intendente Leonardo Raimundo, quienes fueron acompañados por el intendente de Rosario Miguel Lifchitz, el senador nacional Rubén Giustiniani, el senador provincial por el departamento San Lorenzo Eduardo Galareto y el Jefe del Regimiento de Granaderos a Caballo Coronel Julio Néstor Junco, entre otros miembros del gabinete municipal, representantes eclesiásticos y de diversas fuerzas vivas de la ciudad.
El momento más emocionante del encuentro se centró en la carga de caballería, cuando los granaderos lanzaron sus monturas al galope y en el estruendo de cañonazos, los gritos de los jinetes y el público enfervorizado, se rememoró el ataque que realizaran los valientes efectivos al mando del entonces Coronel San Martín en el bautismo de fuego de sus granaderos, la mañana del 3 de febrero de 1813.
Antes, había sido entregado un diploma de honor enviado por el presidente del Senado nacional Ing. Julio Cobos al intendente Raimundo, habían sido descubiertas las placas conmemorativas en el pórtico del Campo y se habían realizado ofrendas florales en la llama votiva bajo las Alas de la Libertad.
A la carga de los granaderos siguió la lectura del parte de guerra que escribiera José de San Martín una vez finalizado el enfrentamiento y la entonación de las estrofas del Himno Nacional.
La invocación religiosa estuvo a cargo de Fray Angel Gaite, Guardián del Convento San Carlos, e hicieron uso de la palabra el Intendente Raimundo y el Gobernador Binner.
Mientras se procedía al arrío de la Bandera oficial del acto se desató una tormenta de lluvia y viento que obligó a la desconcentración apresurada de los presentes.