Gracias a una iniciativa de la Subsecretaría de la Producción, docentes de la UNR dictaron un taller sobre “El rol de la mujer en la empresa familiar”. Junto a empresarias y funcionarias intercambiaron ideas sobre la compatibilización de las tareas domésticas y el trabajo privado, la discriminación laboral hacia el género femenino y las políticas de acción positiva tendientes a la inclusión.
Ayer lunes a la tarde se llevó a cabo en el SUM del Centro de Atención al Turista un taller de capacitación sobre “El rol de la mujer en la empresa familiar”. El curso fue dictado por profesionales de la UNR a partir de un convenio que el Foro de Universidades suscribió con el Ministerio de la Producción de la provincia y se desarrolló en nuestra ciudad gracias a gestiones de la Subsecretaría de la Producción a cargo de María Inés Rubinich.
En el marco de las actividades conmemorativas por el Día de la Mujer, docentes, empresarias y funcionarias intercambiaron ideas sobre la resolución de los conflictos en el ámbito empresarial, la compatibilización de las tareas domésticas y el trabajo privado, la discriminación laboral hacia el género femenino y las políticas de acción positiva tendientes a la inclusión.
“Analizamos las dificultades que encuentra la mujer para compatibilizar la actividad doméstica con lo laboral y hablamos de cómo puede romper ese techo de cristal por el cual llegamos a un determinado puesto y no podemos ascender de allí en las organizaciones”, expresó la docente Patricia Giustiniani.
La docente fundamentó estas observaciones en los datos emanados de una encuesta realizada por el Ipec (Instituto Provincial de Estadísticas y Censos) y la Facultad de Ciencias Económicas de acuerdo a los cuales las mujeres sólo ocupan el 30 por ciento de los cargos jerárquicos de las empresas y le destinan a las tareas hogareñas más horas que los hombres.
“La mujeres sufren segregación horizontal porque son superespecializadas en funciones puntualmente femeninas y además vertical porque los puestos más importantes en las organizaciones son ocupados por varones, a pesar de que son más las egresadas son más que los hombres”, añadió.
Para revertir esta tendencia, la profesora propuso, en primer término, otorgarle visibilidad a la problemática para trabajar luego en el diseño de “políticas de acción positivas de democratización”.
“Por una parte debemos lograr que las empresas avancen en la flexibilidad horaria, guarderías escolares y políticas con licencias parentales para que no sólo la madre sino también el padre se tome licencia cuando tienen chicos. Por otra, hay que democratizar el ámbito privado y que sea compartido entre hombres y mujeres con el propósito de que éstas tengan más tiempo para dedicarse al ámbito laboral”, cerró Giustiniani.
Por último, el intendente Leonardo Raimundo, presente en el taller, destacó tanto la importancia de la mujer en la empresa, como la de los emprendimientos familiares en la economía provincial. “El 70 por ciento de las actividades empresariales son de cuño familiar; hay una tradición de familia en el ámbito organizacional empresarial en el cual es muy importante el rol de la mujer. Por ello es muy importante analizar diferentes alternativas y avanzar en la capacitación para resolver conflictos y terminar con la discriminación”, dijo el funcionario.