El remate de 68 motos y 35 autos secuestrados en operativos inyectó a las arcas municipales la suma de cien mil pesos. Hacia fin de año se efectuará una nueva subasta en la que se pondrán a la venta casi 400 rodados.
El miércoles pasado el municipio llevó a cabo una subasta de 68 motos y 35 automotores mediante la cual recaudó cien mil pesos. Los vehículos rematados habían sido retenidos en operativos de control y al no regularizarse la infracción que provocó su remisión en un plazo mayor a los seis meses, fueron ejecutados en venta pública de acuerdo a lo establecido por la Ley Provincial Nº 11.856.
Los lotes fueron subastados íntegramente y los automóviles promediaron un precio de 1500 pesos, mientras que los ciclomotores, 850. Los compradores pagaron una seña del veinte por ciento del total y a partir de la aprobación del decreto de subasta deberán pagar el ochenta por ciento restante en un término no superior a los diez días.
Los cien mil pesos embolsados por el municipio serán destinados a Rentas Generales, aunque está prevista la creación de cuenta especial para que los dineros obtenidos de estas operaciones sean destinados a la seguridad vial. “De esa forma cerraríamos el circuito que comienza en las tareas de educación, continúa en los operativos y termina en el último escalón, que es la subasta”, expresó Aricó.
Además, el funcionario señaló algunos de los beneficios que reviste este tipo de subastas. “La mayoría de los vehículos secuestrados no son de la ciudad de San Lorenzo y es una carga para el municipio que terminan soportando los contribuyentes de San Lorenzo. De esta forma, con su subasta a un bajo precio encontramos una devolución”.
Finalmente, el titular de Coordinación anticipó que “cerca de fin de año” se efectuará otra gran subasta en la que se pondrán a la venta casi cuatrocientas unidades.